Descubrieron que los besos no sabían a nada...

y que falta de gusto, que desdicha
sentí en el momento en que tus labios
se volvieron inertes junto a los míos. 

Que desgraciado fui la tarde
en que te alejaste de mí.

Todos nos vamos, nos estamos yendo, eso sí.
Otra vez poner en la balanza lo sucedido y la soledad.
Ammyt me devorará a mí, pero a vos también.

Maltrecho corazón.
Ojos inundados.
Pero la mandíbula relajada.

Hace tiempo estoy entregado,
como entregado estuve a vos.
Me llevo la sensación de haber sido robado,
no sé si mucho más. 

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