Entradas

Mostrando entradas de septiembre, 2016
Algo nuevo tiene que quedar en el fondo, algo más necesito sentir.

Costumbre

Creo que me estoy acostumbrando a la soledad, a llegar y que nadie me bese, a que nadie me diga: ¿Cómo estás? Creo que me estoy acostumbrando a la soledad, a la cama fría, a dormir sin vos. A despertarme en el medio de la noche y no tener a quién abrazar. Y sí, me estoy acostumbrando a vivir así, a no saber con quien hablar las cosas que hablaba con vos. A no saber a quién extrañar. No estoy triste, ni angustiado, porque sabía que esto iba a pasar. Se me hace cuesta arriba, es verdad pero no quiero volver atrás. Me estoy acostumbrando a la soledad, a ver amor en la calle y sentirme raro, a sentir la desesperación por ser amado, por necesitar abrazos que la soledad no sabe dar. Me estoy acostumbrando a la soledad, sin embargo, espero que una sonrisa me venga a rescatar, que me saqué del letargo y me lleve a la plenitud, que me haga olvidar el vacío y me de un poco de luz. El silencio y la oscuridad me atrapan, sé que ya no brill
 Sentirse invisible, estar rodeado de extraños; eso no es lo feo, lo feo es no querer verlos. Pensandolo bien: lo feo es que ellos tampoco te quieran ver. No puedo evitar, estando en esta situación, pensar en los amores. Estoy sufriendo por amor (que es por lo que vale la pena sufrir), por un amor que no pudo salvar una relación, y digo relación porque ésta fue la que murió, no el amor.   Cuando se ama de verdad se ama para siempre, no importa lo que pase. El amor no entiende de otra cosa; el amor no piensa en otra cosa; al amor no le afecta el tiempo, a las relaciones sí. La costumbre es la asesina del amor, son incompatibles. Cuando la costumbre entra en una relación el amor ya no puede expandirse, no puede llegar más hondo Y es así, las relaciones como las historias terminan; el amor, como la historia misma, no lo hace. El problema es no asumir cuando una relación se termina. El miedo nos lleva a estirar algo que ya murió, algo que ya no existe. El miedo a la soledad, por supuesto,
Simulemos, por favor, que está todo bien. Sólo esta noche, no digas nada y hagamos de cuenta que seguimos enamorados como era hace años. Basta de sentir dolor, basta de lastimarnos. Sé que ya no hay vuelta atrás, pero por este sábado de septiembre finjamos que nada pasó. Sólo esta noche, amemos como antes. Y que afuera todo pueda estallar. Necesito contención, necesito un abrazo sincero, un beso de esos que vos sabías darme. La noche fría y nublada me impide no extrañarte. Aunque las heridas sigan sangrando, aunque el tiempo haya empeorado todo, aunque hayan caído tantas lagrimas, sólo hoy empecemos de nuevo, sólo esta noche. ¿En qué estoy pensando? No vas a volver, no quiero que lo hagas. Nunca podré alejar tantas mentiras. Si te tuviera enfrente no podría ni mirarte.