Entradas

Mostrando entradas de febrero, 2022
 Si te animás, vamos. Yo miedo no tengo porque roto estoy y encuentro placer en el dolor. Si te animás, me animo y así disfrutamos del frío, así la muerte se entretiene al vernos, así nos entretenemos los dos. Sin tenerte te quiero sentir y que me sientas, que con los ojos cerrados sepas quien soy pero no importe, que la hegemonía sea del calor y del goce. Que tu historia y la mía queden en un costado.

Palabras

 "La escritura como acto de fe." Yo diría que sí, rotundamente. Fe en que algo no va a morir, en que la tinta será eterna, quizás como los ojos que leerán. Sin embargo, toda fe se me vuelve algo absurda no importa su naturaleza Y es que mi propia existencia se me presenta como absurda en último término. ¿Qué puedo hacer? Pero las palabras son otra cosa, se saltean la existencia y no les importan los desatinos. Yo no digo, ellas dicen. Y si pienso, mis pensamientos son su herramienta y yo mucho menos que un motor. De emociones no hablo, ahora las palabras se instauran en el poder. Tiranía literaria que domina mi existencia. Cada tanto logro silenciarlas, aunque sin quitarles la hegemonía. O son ellas las que se apiadan de mi sistema nervioso y frenan. O se aburren, alejándose, dejándome solo, despojado, sin fe ni perspectivas porque cuando no están conmigo yo no soy, ni puedo ser.
 Donde habita el olvido yo me pregunto dónde van los recuerdos cuando de nuestro amor queda poco y nada. ¿Cuánto valen esas noches compartidas, cubiertas de engaño?  Más dañado que antes, parado donde habita el olvido, si te miro ahora, quiero enceguecer.  Lo que hice ya no importa, no vuelve más. No poder comprenderte no me hace perder la sinceridad. Sincericidio y soledad.  Ahora el calor no falta, lo que falta es ilusión. Lo que no encuentro es voluntad y ese es un premio que no te quiero asignar.  Así que sigo y me convenzo de seguir, así que doy calor y escucho. Así llega la siguiente página, donde vos no estás. 
Fin de semana, por lo general excesos, goce, sube y baja. Bajo mi piel y mi cama; bajo el polvo que cubre lo que soy. Ojos locos sin querer mirar, sin querer dejarse ver. En la oscuridad me siento mejor. En la oscuridad donde ya no te busco, en la oscuridad donde me muevo como si conociera cada metro cuadrado, pero no me conozco ni a mí.  Victima y victimario de mi estupidez y la culpa que me genera. 

De amor se trata

 Y si tuviese que hacer una lista no hay forma de que esté completa. Los recuerdos juegan conmigo, cómo yo jugué con todo.  De amor se trata, eso seguro, propio y de otros conmigo y sin mí, seguro mi corazón late seguro está averiado también.